La tumba del guerrillero
dónde, dónde, dónde está
su madre está preguntando
nadie le responderá
la tumba del guerrillero
dónde, dónde, dónde está
el pueblo está preguntando
algún día lo sabrá.
Guerrillero, vos surgís en ríos
montes y praderas
en el viento que mece el chinchorro
del hijo del Juan
en las manos humildes y toscas
de la vivandera
en la Milpa donde el campesino
busca y busca el pan.
Como dijo el poeta trapense
de Solentiname
no quisieron decirnos el sitio
donde te encontrás
y por eso tu tumba es todito
nuestro territorio
en cada palmo de mi Nicaragua
ahí vos estás.
La tumba del guerrillero
dónde, dónde, dónde está
su madre está preguntando
nadie le responderá
la tumba del guerrillero
dónde, dónde, dónde está
el pueblo está preguntando
algún día lo sabrá.
Guerrillero, vos nacés de nuevo
en la carabina
en los bronquios de Pedro el minero
que en Siuna murió
en los ojos de los miserables que en Acahualinca
aún espera sedientos
la aurora de la rendición.
Como dijo el poeta trapense
de Solentiname
no quisieron decirnos el sitio
donde te encontrás
y por eso tu tumba es todito
nuestro territorio
en cada palmo de mi Nicaragua
ahí vos estás.
dónde, dónde, dónde está
su madre está preguntando
nadie le responderá
la tumba del guerrillero
dónde, dónde, dónde está
el pueblo está preguntando
algún día lo sabrá.
Guerrillero, vos surgís en ríos
montes y praderas
en el viento que mece el chinchorro
del hijo del Juan
en las manos humildes y toscas
de la vivandera
en la Milpa donde el campesino
busca y busca el pan.
Como dijo el poeta trapense
de Solentiname
no quisieron decirnos el sitio
donde te encontrás
y por eso tu tumba es todito
nuestro territorio
en cada palmo de mi Nicaragua
ahí vos estás.
La tumba del guerrillero
dónde, dónde, dónde está
su madre está preguntando
nadie le responderá
la tumba del guerrillero
dónde, dónde, dónde está
el pueblo está preguntando
algún día lo sabrá.
Guerrillero, vos nacés de nuevo
en la carabina
en los bronquios de Pedro el minero
que en Siuna murió
en los ojos de los miserables que en Acahualinca
aún espera sedientos
la aurora de la rendición.
Como dijo el poeta trapense
de Solentiname
no quisieron decirnos el sitio
donde te encontrás
y por eso tu tumba es todito
nuestro territorio
en cada palmo de mi Nicaragua
ahí vos estás.
envoyé par Maria Cristina Costantini - 14/2/2014 - 15:33
"El poeta trapense del Solentiname" nell'ultima strofa è Ernesto Cardenal (1925-2020).
Il Solentiname è un piccolo arcipelago situato nella parte meridionale del Lago Cocibolca, o Gran Lago Nicaragua. Nel 1966 Cardenal vi fondò una comunità monastica.
La canzone di Carlos Mejía Godoy è ispirata ad una poesia dello stesso Cardenal, intitolata "Epitafio para la tumba de Adolfo Báez Bone" (1961)
Adolfo Báez Bone è stato uno degli ufficiali che nell'aprile del 1954 tentarono di assassinare il dittatore Anastasio Somoza García per avviare un processo democratico. Non ebbero successo, vennero catturati e uccisi e le loro sepolture non vennero mai rivelate.
Ernesto Cardenal, poeta, presbitero e teologo nicaraguense, protagonista della rivoluzione sandinista, per anni ministro della cultura, sospeso a divinis da papa Giovanni Paolo II nel 1984 e riabilitato da Papa Francesco nel 2019, è morto lo scorso 1 marzo a Managua.
Il Solentiname è un piccolo arcipelago situato nella parte meridionale del Lago Cocibolca, o Gran Lago Nicaragua. Nel 1966 Cardenal vi fondò una comunità monastica.
La canzone di Carlos Mejía Godoy è ispirata ad una poesia dello stesso Cardenal, intitolata "Epitafio para la tumba de Adolfo Báez Bone" (1961)
Adolfo Báez Bone è stato uno degli ufficiali che nell'aprile del 1954 tentarono di assassinare il dittatore Anastasio Somoza García per avviare un processo democratico. Non ebbero successo, vennero catturati e uccisi e le loro sepolture non vennero mai rivelate.
Ernesto Cardenal, poeta, presbitero e teologo nicaraguense, protagonista della rivoluzione sandinista, per anni ministro della cultura, sospeso a divinis da papa Giovanni Paolo II nel 1984 e riabilitato da Papa Francesco nel 2019, è morto lo scorso 1 marzo a Managua.
EPITAFIO PARA LA TUMBA DE ADOLFO BÁEZ BONE
Te mataron y no
nos dijieron donde
enterraron tu cuerpo,
Pero desde entonces
todo el territorio
es tu sepulcro
o más bien;
en cada palmo
de territorio nacional
en que
no está tu cuerpo
tú resucitaste
Creyeron que te
mataban con una orden
de ¡fuego!
Creyeron que te
enterraban
Y lo que hacían
era enterrar una semilla.
Te mataron y no
nos dijieron donde
enterraron tu cuerpo,
Pero desde entonces
todo el territorio
es tu sepulcro
o más bien;
en cada palmo
de territorio nacional
en que
no está tu cuerpo
tú resucitaste
Creyeron que te
mataban con una orden
de ¡fuego!
Creyeron que te
enterraban
Y lo que hacían
era enterrar una semilla.
B.B. - 22/5/2020 - 16:25
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