Violeta Parra: El Amor
GLI EXTRA DELLE CCG / AWS EXTRAS / LES EXTRAS DES CCGOriginale | "Con mi litigio de amor", il testo di derivazione: |
VIOLETA PARRA: EL AMOR Recitado: Mas, van pasando los años las cosas son muy distintas lo que fue vino hoy es tinta lo que fue piel hoy es paño lo que fue cierto hoy engaño. Todo es penuria y quebranto de las leyes yo me espanto lo paso muy confundida y es grande torpeza mía buscar alivio en mi canto. Los tiempos se van volando y van cambiando las cosas. Crecí en el trigo melosa la siembra fue castigando fue la cosecha mermando la esperanza quedó trunca. La gente no sabe nunca lo que mañana la espera... lo que mañana la espera la gente no sabe nunca. Entré al clavel del amor. Cegada por sus colores me ataron los resplandores de tan preferida flor. Ufano de mi pasión dejó sangrando una herida que lloro muy conmovida en el huerto del olvido. Clavel no ha correspondido. ¡Qué lágrimas tan perdidas! La vida me da recelo me espanta la indiferencia la mano de la inclemencia me ha echado este nudo ciego. La fuerza me ha consumido y me ha atormentado el alma pa'mí lo que llaman calma es vocablo sin sentido pa'mí lo que llaman calma es vocablo sin sentido. El sol reseca el barbecho lo deja como la espina me clava con negra inquina si piso este duro lecho. Camino por un momento las calles a la sin rumbo veo que estoy en el mundo sin más que el alma en el cuerpo veo que estoy en el mundo sin más que el alma en el cuerpo. Miserias y alevosías anudan mis pensamientos entre las aguas y el viento me pierdo en la lejanía. No lloro yo por llorar sino por hallar sosiego. Mi llorar es como un ruego que nadie quiere escuchar Mi llorar es como un ruego que nadie quiere escuchar. | VIOLETA PARRA: EL AMOR Con mi litigio de amor llegué donde el señor juez, por remediar de una vez la causa de mi aflicción; le digo que en Concepción sufrí muy grande amargura que a punto de la locura me tuvo el desasosiego y al señor juez yo le ruego: senténcieme con premura. Mi caso tan complica'o es éste, Su Señoría, se me perdió l'alegría sin saber cómo ni cuándo, aquí me ve usted llorando con la mirada en el suelo, la vida me da recelo, m'espanta su indiferencia, la mano de la inclemencia me ha echa'o este nudo ciego. Ya ve mi cara, señor, más pálida que la muerte, escuche cómo de fuerte palpita mi corazón, mi pobre caparazón tirita como en invierno, mis venas son un infierno que arden con fuego mortal, castígueme el tribunal si acaso culpa yo tengo. Es increíble y penoso lo que yo estoy padeciendo, que se me van escondiendo las ansias de hallar reposo, motivo muy doloroso el sueño me ha prohibido, la fuerza me ha consumido y me ha atormentado el alma p'a mí lo que llaman calma es vocablo sin sentido. Si el día se me hace largo, la noche el doble, señor; con amapolas en flor consigo entrar en letargo; mi cautiverio es amargo, sus yerros aborrecibles, que ya se me hace insufrible la luna del alto cielo, y la Virgen del Carmelo no está p'a mí disponible. |