Distinto respirar, desde otro lugar
no quema al inspirar, no estremece al expirar.
Si todo va a cambiar,
por qué aferrarse al manantial,
se nos olvidó entregar
aparcamos la obviedad existencial.
¿Y cuándo va a parar?
Este dolor que llego y se quedó,
no hay marcha atrás,
no se puede volver a tapar.
¿Quién dijo que el remedio estaba más allá?
Siempre más allá en otro lugar
Es nuestro presente el futuro que queremos liberar.
No está tan lejos
el campo que hay que cultivar.
Cada cuerpo una semilla
que sembrar en otro cuerpo,
que es también campo que recolectar.
Viejo es el cielo, vieja la tierra,
viejo el encuentro entre las fieras,
viejo el retrato de lo que nunca sabremos.
Vieja la pregunta de dónde y hacia dónde,
viejo el sufrimiento de saberse mortal y el eterno.
Si todo va a cambiar
por qué aferrarse al manantial,
se nos olvidó entregar
aparcamos la obviedad existencial.
¿Dónde quedo la libertad?
Primero habrá que preguntar
dónde quedo la voluntad.
En el camino hacia la bondad
están las sombras más oscuras que abrazar
para poder avanzar con claridad.
No se pisa la cruz sin pisar la cara,
entre el bien y el mal está la nada
señalando el todo.
Si uno no cambia,
ya puede ir cambiando a fuera
que va a seguir el mismo esquema,
hormiga pero en otro hormiguero.
Y si uno cambia adentro
sin ver lo que hay afuera
será absorbido por la marea
que sostiene los barcos de guerra.
Seguimos sin ver, seguimos sin ver,
como pájaros encerrados
en jaulas abiertas...
Somos pájaros encerrados en jaulas abiertas.
no quema al inspirar, no estremece al expirar.
Si todo va a cambiar,
por qué aferrarse al manantial,
se nos olvidó entregar
aparcamos la obviedad existencial.
¿Y cuándo va a parar?
Este dolor que llego y se quedó,
no hay marcha atrás,
no se puede volver a tapar.
¿Quién dijo que el remedio estaba más allá?
Siempre más allá en otro lugar
Es nuestro presente el futuro que queremos liberar.
No está tan lejos
el campo que hay que cultivar.
Cada cuerpo una semilla
que sembrar en otro cuerpo,
que es también campo que recolectar.
Viejo es el cielo, vieja la tierra,
viejo el encuentro entre las fieras,
viejo el retrato de lo que nunca sabremos.
Vieja la pregunta de dónde y hacia dónde,
viejo el sufrimiento de saberse mortal y el eterno.
Si todo va a cambiar
por qué aferrarse al manantial,
se nos olvidó entregar
aparcamos la obviedad existencial.
¿Dónde quedo la libertad?
Primero habrá que preguntar
dónde quedo la voluntad.
En el camino hacia la bondad
están las sombras más oscuras que abrazar
para poder avanzar con claridad.
No se pisa la cruz sin pisar la cara,
entre el bien y el mal está la nada
señalando el todo.
Si uno no cambia,
ya puede ir cambiando a fuera
que va a seguir el mismo esquema,
hormiga pero en otro hormiguero.
Y si uno cambia adentro
sin ver lo que hay afuera
será absorbido por la marea
que sostiene los barcos de guerra.
Seguimos sin ver, seguimos sin ver,
como pájaros encerrados
en jaulas abiertas...
Somos pájaros encerrados en jaulas abiertas.
inviata da Riccardo Gullotta - 19/8/2022 - 23:12
×
Letras y música / Testo e musica / Lyrics and music / Paroles et musique / Sanat ja sävel :
Sílvia Tomàs
Interpretada por / Interpreti / Performed by / Interprétée par / Laulavat :
Sílvia Tomàs Trio
Album: Jaulas abiertas
“Siamo uccelli chiusi in gabbie aperte” è l’epilogo della canzone.
Seguono commenti della compositrice sull’album.